Sam Kerr, estrella del Chelsea y de la selección australiana de futbol, enfrentó un juicio en el Reino Unido por presunto acoso racial en contra del agente de policía Stephen Lovell por llamarlo “estúpido blanco” en enero de 2023, y este martes 11 de febrero fue declarada inocente.
El veredicto se dio después de más de cuatro horas de deliberaciones por parte de un jurado de 12 personas y en el séptimo día del juicio en el Tribunal de la Corona de Kingston en Londres, de acuerdo con Proceso.
El incidente ocurrió en enero de 2023, cuando Kerr y su pareja, la futbolista Kristie Mewis, fueron llevadas a una comisaría después de una noche de fiesta y una disputa con un taxista.
Se alega que ambas futbolistas habían bebido alcohol cuando fueron llevadas a la estación de policía por un taxista, quien se quejó de que se negaron a pagar los costos de limpieza después de que Kerr vomitó y de que Mewis rompió la ventanilla trasera del auto. En la comisaría, presuntamente la estrella del Chelsea se volvió abusiva e insultante hacia Lovell al llamarlo “estúpido blanco”.
En el juicio, Kerr dijo que se sintió “atrapada” durante el viaje en taxi, pues el conductor se negaba a llevarlas a su destino, por lo que Mewis rompió la ventanilla para poder escapar. También confesó que lamentaba la forma en que se expresó y negó que llamar “blanco” al oficial fuera usado como un insulto.
La delantera del Chelsea señaló que la actitud que tomó con Lovell fue "por la manera como me acusó de mentir" y por haberla detenido por un delito de destrucción, cuando su pareja había reconocido ante la policía que había sido ella la que rompió el cristal.
“Creí que él estaba usando su poder y privilegio sobre mí porque me acusaba de ser algo que no soy... Estaba tratando de expresar que debido al poder y privilegio que ellos (la policía) tenían. Nunca tendrían que entender lo que acabábamos de pasar y el miedo que teníamos por nuestras vidas (...). Pensaba que me trataban de forma diferente por mi color de piel”, contó.
Finalmente, después de horas de deliberación, la capitana y máxima goleadora de todos los tiempos de la selección australiana, apodada como «Las Matildas», fue declarada "no culpable" de acoso racial al policía.
¿Racismo inverso?
Este caso abrió debate sobre el “racismo inverso”, un tema ampliamente discutido en estudios sociales y académicos. De acuerdo con el libro Racismo. Recorridos conceptuales e históricos (2022) publicado por el Consejo Nacional para la Prevención de la Discriminación (Conapred), el racismo no se trata solo de prejuicio individual, sino de una estructura de poder que históricamente ha discriminado a ciertos grupos.
En este sentido, el racismo implica la opresión sistemática de una comunidad basada en su raza, lo que ha sucedido históricamente con grupos racializados, como personas negras, indígenas y otras minorías en diferentes partes del mundo.
Cuando una persona racializada hace comentarios sobre alguien blanco, como en el caso de Sam Kerr, puede haber un acto de discriminación, pero no encaja en la definición estructural de racismo porque las personas blancas no han sido históricamente oprimidas en sistemas sociales y políticos.
Actualmente el concepto de “racismo a la inversa” ha sido ampliamente difundido por los movimientos supremacistas blancos, los cuales sostienen que las luchas de los grupos inferiorizados y excluidos por sus derechos suponen una amenaza al modo de vida de la “raza” y “cultura blancas”.
“Esta teoría sostiene que ahora existe un 'racismo a la inversa', en el que las sociedades blancas son las víctimas. Sin embargo, como vimos en el segundo capítulo, el racismo a la inversa no existe, pues para que exista racismo es condición necesaria que quienes lo ejercen estén en posiciones estructurales de poder”, menciona Conapred.
Por eso, en este caso, el tribunal determinó que el comentario de Kerr, aunque inapropiado, no cumplía con los criterios legales para considerarse un delito de acoso racial.
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