En el marco del Día Mundial de la Salud, que se conmemoró este 7 de abril, la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que, al año, cerca de 300 mil mujeres fallecen durante el embarazo o el parto; mientras que más de dos millones de recién nacidos pierden la vida durante su primer mes de vida y unos dos millones nacen muertos. En este sentido, remarcó la urgencia de atender este problema que, estima, persistirá para 2030.
La OMS también informó que, en 2023, las causas principales de la mortalidad materna fueron hemorragias graves tras el parto; infecciones postparto; hipertensión arterial durante el embarazo, ya sea por preeclampsia o eclampsia; complicaciones generales en el parto y abortos peligrosos.
Derivado de esta crisis, el organismo internacional recalcó la importancia de la evolución de los sistemas de salud "para gestionar los numerosos problemas de salud que inciden en la salud de la madre y el recién nacido. No se trata solamente de complicaciones obstétricas directas, también se incluyen las afecciones de salud mental, las enfermedades no transmisibles y la planificación familiar”.
Como parte de las acciones globales para reducir la cifra de muertes relacionadas con el embarazo, la OMS arrancó el programa “Comienzos saludables, futuros esperanzadores”, el cual hace un llamado a los gobiernos y al sector salud a fortalecer las acciones que llevan a cabo para la prevención en los niveles de mortandad materna y de recién nacidos, de manera que se prioricen los cuidados de la mujer a largo plazo. La campaña tendrá una duración de un año, durante el cual se difundirá información para apoyar a que los embarazos sean lo más saludables posibles y, por ende, se tenga un parto igual de saludable.
Fuente: Organización Mundial de la Salud
Esta campaña consta de cuatro objetivos específicos:
La Secretaría de Salud del Gobierno de México emitió un boletín en el que anunció que se suma a la campaña “Comienzos saludables, futuros esperanzadores”. La Secretaría informó que se une a la OMS “en su lucha global para reducir las muertes maternas y neonatales, promoviendo la salud y el bienestar de las familias en México y en el mundo”.
Fuente: Secretaría de Salud
Recordó también que el pasado 3 de abril presentó el Protocolo Nacional de Atención Médica-Primeros 1000 días de vida, el cual incluye los 270 días del embarazo y los 730 días de los primeros dos años de vida del recién nacidos. Esto, considerando que se trata de un periodo “crucial en el que se establecen las bases para la salud a lo largo de toda la vida, impactando directamente en el crecimiento y neurodesarrollo de la persona”. Señaló que dicho protocolo surgió en respuesta al mandato presidencial de acompañamiento a las mujeres en los primeros mil días de vida del bebé.
De la misma manera, destacó la labor del Instituto Nacional de Perinatología (INPer), el cual se encarga de darle atención a los embarazos más complejos en México con tecnología que permite la detección temprana de complicaciones en la madre y en el neonato.